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Nuevo lío alrededor de Vibram, la conocida marca de zapatillas para correr (entre otras) minimalistas que tiene en su catálogo la familia de modelos FiveFingers, que emulan a un calcetín para ofrecer el máximo ajuste y sensaciones del terreno. La familia de Abebe Bikila ha puesto una demanda a Vibram por utilizar su nombre sin permiso.
Abebe Bikila es leyenda del atletismo, falleció en 1973 pero antes nos dejó una de las grandes gestas de este deporte. El destino quiso que fuese seleccionado por Etiopia para ser parte del equipo que participaría en la Maratón de los Juegos Olímpicos de Roma de 1960 (sustituyó a un corredor que se lesionó días antes), sin embargo, Bikila tenía problemas para correr con zapatillas, le producían ampollas, así que decidió hacerlo descalzo.
Así, corrió la Maratón de Roma descalzo y no sólo la completó, sino que ganó proclamándose campeón olímpico y además estableciendo una nueva plusmarca mundial con 2 horas, 15 minutos y 16 segundos. De esa forma llegamos al presente, Vibram, como referente en calzado minimalista, lleva utilizando el nombre “Bikila” en varias de sus zapatillas desde hace años, e incluso en 2010 registró la marca.
Demanda a Vibram por utilizar el nombre de Bikila en sus zapatillas minimalistas
Algunos de los modelos actuales que hacen referencia al atleta etíope son, por ejemplo, las Vibram FiveFingers Bikila EVO, Evo WP o las Bikila LS, sin embargo, la familia de Abebe no está muy de acuerdo en que se utilice su nombre. El hijo de Bikila, Teferi Bikila, puso el pasado lunes 9 de febrero una demanda a Vibram porque, asegura, la compañía no tiene permiso para utilizarlo.
De esta forma, la familia reclama a Vibram 15 millones de dólares por daños y perjuicios ya que consideran que se debe respetar el legado de Abebe Bikila, aunque es un poco extraño que lo hagan tras años con las FiveFingers Bikila en tiendas (y siendo enormemente populares).
Veremos cómo queda el tema, pero 2015 empieza torcido para Vibram y no es el primer dolor de cabeza que les surge en los últimos tiempos. Recordemos que el pasado año otra demanda colectiva les obligó a devolver un total de 3.75 millones de dólares a los compradores de FiveFingers en EEUU por publicidad engañosa, ya que se anunciaba que utilizándolas se podían disminuir las lesiones y fortalecer la musculatura, aunque no ha sido demostrado científicamente.
